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jueves, 17 de febrero de 2011

No te encadenes

La verdad es que nos conocimos un año que coincidimos de Erasmus en Milán. Justo ahora que me estoy aficionando por el rock viene U2 a la ciudad. ¿Por qué cuando me van las cosas bien tiene que venir alguien y joderlo? Cristina, sí, la que estaba en mi clase en preescolar y se fue a vivir a la ciudad, pues está en mi clase en la universidad, aún no me lo creo.
Una de las cuestiones a la que una persona da más vueltas en su cabecita durante su vida es la relación y sucesión entre los acontecimientos que le ocurren a lo largo de su corta existencia. A esta progresión de hechos que nos suceden de una forma impensable y extraordinarias para nosotros solemos llamarla Destino. "El Destino quiere que sea médico" podemos llegar a decir si una serie de cosas que vivimos nos hace pensar que estamos dotados con facultades sobre medicina. Es decir, que el Destino nos ha puesto unas situaciones determinadas para que nos decantemos por estudiar la carrera de medicina.
Pero, ¿qué es el Destino y quién lo rige? Entendemos que el Destino dicta nuestras vidas, por lo que alguien o algo ha escrito una especie de guión del que no podemos salirnos. ¿No se parece esto demasiado a las sociedades feudales teocéntricas en la que se nos obligaba a no salirnos de los designios de Dios? Señores, hemos salido de eso para entrar en una desgana y en una desmotivación, peores que una obligación, de querer salir de la creencia de que la vida está escrita. Si te obligan a pensar así tiene un pase porque no te dejan actuar, pero si eres libre es muy triste que te encadenes de esa manera y lo veas todo rutinario y sin entusiasmo.
Algún erudito habrá sentenciado que las cosas pasan "porque tienen que pasar". No obstante, yo pregunto: ¿la historia del mundo gira en torno a una línea recta? ¿No tiene más sentido que las cosas surjan por la mera y simple interacción y cruce de unas vidas con otras? A mí me resulta más lógico pensar que nadie avanza en su vida en línea recta, sino que estamos en un laberinto que cambia de forma a cada rato, por lo que se cruzan, se cortan, se ensanchan y un largo etcétera los caminos. Estamos influidos por todo con lo que hemos tenido contacto, ya sea para rechazarlo o para imitarlo, y que cada acto voluntario e involuntario de todas y cada una de las personas de este mundo, las que llegan, las que permanecen y las que se van, pueden tocarse en un sinfín de situaciones que pueden darse con total naturalidad.
Así pues, mi sincera opinión es que el Destino de cada individuo es el que él mismo, de forma individual y con pinceladas de ciertas personas, quiere que sea. El hecho de que tu padre y tu abuelo sean pintores no significa que tú lo vayas a ser. No hay que dejarse llevar tanto por eso, se debe experimentar un poco de todo, siempre con conciencia de lo que se hace, y decantarse por lo que a uno le llame más la atención y le atraiga de forma más especial, siempre desde el respeto y la tolerancia pero sin dejar que nadie te controle.

2 comentarios:

  1. Es cuestión de circunstancias.

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  2. si los filósofos te escucharan o leyeran, te aceptarían en el gremio del tirón jajaja

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